Pagine di quotidiani e riviste dedicate a Giacomo Matteotti - 1925-1974

do se forman las conciencias y se templan las voluntades a las cuales el porvenir no puede ,estar cerrado." Y todavía en 1925, ya herido de muerte por la furia bestial de sus enemigos implacables, anuncia con firmeza: "Es necesario el trabajo de mlJchas vidas para echar los sólidos cimientos de la Italia de mañana. Nosotros damos lo que podemos dar, sin cálculo y sin añoranzas". Hasta el día de su muerte se obstinó en su fe por el generoso y utópico programa de renovación democrática. Quiso servir sin medida la causa de la burguesía en cuya misión libertadora creía ciegamente. · ·El Aventino --que dió una expresión suprema a su pureza y nobleza de apóstol y exaltó en cierto sentido su intransigencia de hombre libre- consagró a un tiempo la flagrante irreparable ruína de las premisas sobre las cuales apoyaba todo su plan de realización del antifascismo. Es a través de la experiencia del Aventino, que los italianos han comprendido la importancia de la revolución integral. Es gracias al Aventino que éstos han sido admitidos a juzgar en última instancias las aptitudes de la burguesía para cumplir con éxito una función directiva en el curso de la lucha por la conquista de la libertad. · Es porque el Aventino ha sido seriamente una concreta realidad histórica que hoy todos los antifascistas, en cu,11lquier parte donde residan, en Italia o en el extranjero, se encuentran solidarios -partiendo de los más opuestos puntos del horizonte político- en el seno del socialismo, y descubren todos en el proletariado la única verdadera e inalterable surgente de la acción revolucionaria. Sin la intervención ejemplar de Giovanni Améndola tal vez nos faltaría aún la prueba de la incapacidad constitucional de la burguesía italiana para librar la batalla por la conquista de la libertad. En este sentido todos le debemos tributo. Así como todos le debemos haber heredado una lección prodigiosa de humanidad, esto es, de dignidad. Ninguno de nosotros podrá jamás olvidar que· en la hora más difícil de nuestra historia, cuando todo se hundía en torno nuestro, y la vileza era elevada a norma de vida por el individuo y por las clases, y la apostasía era premiada como la más fructuosa de las virtudes, él se irguió gigantesco entre los restos del naufragio, •para recomponer con el ejemplQ, la fulgurante belleza y el prestigio soberano del carácter. · Es por esto que nosotros no cesamos de comulgar con él, que en él no dejamos de comulgar. con todos nuestros hermanos -vivos o muertos, grandes u oscuros- de fe y de batalla. "Cuando la tierra --escribió Felipe Turati-; cuando la tierra por quien dió el claro ingenio y la vida volverá a ser tierra de seres vivientes y de. libres, Améndola abrazará a Matteotti sobre la más alta colina de Roma. Será el toque de• llamada de los fieles a formar filas. . . Volverá la gran exilada desde el atroz exilio. Habrá vuelto Italia." Sil VIO TRENTIN MATTEOTTI • XII ANIVERSARIO

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