LUIS ANDRES EDO el mas importante es sin duda el llamado regimen « semiabierto », es decir, el regimen de Patio, en el que el recluso permanece en covi·vencia coloctiva durante 5 o 6 horas diarias, obligaitoriamente, bajo el frio o el sol t6rrido. Los serivicios carce'larios obligados a conceder este regimen, conseouencia de una resistenda total de toda la poblaci6n reclusa, mantenida y proyectada promoci6n tras promoci6n, han conseguido instrumentaNzarlo por procedimientos sOlfisticados de la confidencia, que adquiere por medio del Patio categoria de « Ley penitenciaria ». La « Ley de la confidenda », « reglamento » real que regula la ivi,dade la prisi6n, instrumento prioritario utilizado por los directores, aietua en el seno de los « ghettos » del patio, ,garitos de juego, sabiamente fomentados y tolerndos, e'I montaje de « envolados », a traves de los cuales el recluso se ve implicado - incluso judicialmente - de forma inopinada en otros delitos. Esta·s actuaciones dirigidas por el Cueppo .de Funcionarios de Prisiones, a traves 1de la « ley de la conifiidencia », quedan facilitadas por una figura basica: El Patio. Este constituye el conducto ideal para desarrollar esta actividad represiva. Contrariamente al clasico metodo de introducir en una misma celda a'l chivato que intenta arrancar declaraciones comrpromet-edoras para sus consortes de convivencia celular. El Patio a,parece a primera vista como el marco opruesto, donde el recluso por el esparcimiento colectivo de que diSlfruta, se con1fiacon mayor facilidad y establece re'laciones de aJinidad. Es precisamente en este marco en el •que los servicios caroelarios hacen actuar los equipos de confidentes que se desenvruelven con mayor facilidad ouanto ,que se introducen en los ghettos del Patio con mas soltura. Esta actuad6n de la« ley de la confidencia » adquiere niveles muy graves en casi todos los Centros, especialmente en los ma·s multitudinarios, de prisi6n preventiva, como son Carabanohel (Madrid) y la « Modelo » (Bal:'celona). En estos Centros, son numerosos los reclusos que ingresando por dete:riminado delito, poco despues se encuentran implicados judicialmente en otros expedientes. El Patio se convierte asi en un instrumento polidaco manejado , por los Ser,vicios Penitenciarios, queen teoria no deberian oouparse mas que de la custodia. El metodo clasico de la introducci6n de un ohivato en la ·cdda releva ,de una visi6n artesanal de la « ley de la ·Confidencia », esta adquiere con la manipulaci6n del Patio un nivel de funcionamiento industrial. El sistema de relaciones peni tenciarias espaiiol supera asi todas las formas represivas por su refinamiento degradante. 6
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