PODER SOCIAL EN ARGENTINA tituirse en el nucleo basico y coordinador de todo el proceso. Pero el fracaso le sefi.ala la supervivencia de los datas del problema a pesar de su voluntad. Su asociaci6n con los ricos del campo y algunos - muy pocos - ricos de la ciudad, se muestra no solo débil sino incapaz de ayudarlo en ila empresa. De modo que debe terminar su camino en el punto donde lo habia iniciado, en el propio modo de manifestarse del sistema, en el régimen derivado de los comicios que, en definitiva, es coma decir el régimen de los partidos y el liberalismo, de la Constituci6n, ligados todos elilos indefoctiblamente a las circunstancias, accidentes y fonda de problemas dominantes. La realidad se impone. Esta realidad indica que precisamente aquella conjunci6n de sectores administrativos, politicos, sector econ6micamente poderoso, no ha desaparecido. Y a él se suma el novedoso ingrediente del Ejército. El Ejército ha hecho su primera salida pero organicamente, estructuralmente, continua siendo el E,iército de la suefi.-eraprovinciana, recostado en las espaldas del Estado. Y si no ha de ser el ejecutor directo de la soluci6n, habra, par lo menas, de proporcionar algunos hombres, incorporarse al grupo y gritar « presente » en el conjunto de las fuerzas que se reparten la torta, asegurando asi la canalizaci6n, bien defendida, del sector mas amplio al que pertenece: los administradores -del Estado. Par eso emite una elongaci6n de sue propia rifi.onada y, al convocarse a comicios, ila ciudadania tiene por delante un candidato militar, el general Austin P. Justo, como otrore, en momentos liminares de la iniciaci6n del idilio con los ricos del campo, tuvo al teniente general Julio Argentino Rocca. Tras Justo se amalgaman figuras extraidas de los mas diversos sectores. Hay radicales, conservadores, algunos socialistas, algunos demoprogresistas, hombres ricos de la ciudad y hombres ricos del campo. Varios ganaderos obtienen, sin representatividad requerida, buena tajada de ,la torta. Incluye también fuertes contingentes de la Camara Argentina de Comercio y de los nuevos s·ectores industriales. Y asi queda compuesta la escena. De un modo inesperado viene a constituirse una s,uerte de representaci6n sectorial, pero sobre el eje basico de los partidos politicos, no ya como partido-naci6n concebido al calor de las justi.ficaciones ideol6gicas fascistas del primer periodo. Pero lo que habia sido acuerdo social espontaneo, surgido de la misma naturaleza del proceso que se vivia en el ocaso del siglo XIX y albores del XX, pasa a ser forzada parchadura bajo el justismo. Todos comparten el poder, todos 21
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