NACIONALISMOS propio ocurri6 con la poderosa resistencia a la agresi6n hitleriana que culmin6 con la victoria de las democracias populares en una buena parte del territorio europeo. La agresi6n japonesa a la China, las batallas contra los agresores y los complices del Kuom!ntang, levantaron una ola revolucionaria en la China que culmin6 con la victoria del soc!alismo. He ahi dos aspectos de la guerra, dos facetas de la Jucha de clases que los compafieros del M.I.R. deben tenen en cuenta al ocuparse de la Guerra del Pacifico en su documento: Pinochet vende a Chtle para mantenerse en el poder. Deben pues, los del M.I.R., no perder de vista el caracter de clase qui inspir6 el confl!cto de 1879, antes que defender los intereses de su prop!a burguesia. Antes de la guerra, Bol!v!a era casi un pais indefenso mientras Chile y Peru contaban con àcorazados, ferrocarr!les y oficiales de escuela. La guerra fué un tipico acto de agresi6n sin previa declaraci6n de hostllidades contra una naci6n débil, con el tinico fin de servir intereses imperialistas. Y quienes justlfian esta guerra, son también herederos del espiritu de Portales hoy exaltado por el tlrano Pinochet, y entre quienes la justlf!can esté. para sorpresa nuestra, también el M.I.R., partido que se reclama como el mas intemac!onalista entre todos los partidos de la lzquierda chilena. Viraje tan sorprendente desde un intemacionallsmo de 360 grados hasta un chauvlnlsmo de iguales quilates no deja, por supuesto, de tener su expllcaci6n. Y sucede que la escuela de Portales no s6lo ha dejado sus rastros entre los politicos de la burguesfa, después de varios lustras y decenios también algunos honestos revolucionarios ch!lenos, no todos por suerte, hablan el mismo Ienguaje que el padre de la oligarquia pruslana de Chile en su tiempo hablaba. Ya sabemos que la dictadura ideol6gica de las clases dominantes tiene el suficiente peso como para lntroducir en las esferas obreras su influencia, pero es contra esa influencia justamente que Ios partldos obreros desatan su Jucha ideol6gica, para liberar a todos Ios obreros de la acci6n perturbadora de Ios ide6Iogos e historiadores burgueses, para conseguir de este modo que la clase obrera avance en su conciencia y que como clase se independice de toda ideologia ajena. Sobre la cuesti6n del Pacifico no existe tampoco un criterio uniforme en la burguesia chilena. Hay una diferencia apreciable entre Ios circulos mé.s cavernarios y reaccionarios de la burguesia y los otros mé.s moderados. Los primeras odian al pueblo boliviano y en su del!rio antl-bollviano falsifican Ios hechos hist6ricos a su libre arbitrio, entre otros no faltan Ios mé.s fané.ticos que a.firman que Boltvia nunca tuvo saltda al mar. Los grupos burgueses mas cuerdos entraron ya en el pasado en tratativas con Bolivie. para devolverle sus hist~ ricos derechos sobre el mar. Hubieron negociaciones con los gobiemos de Ibafiez del Campo y de Frei, f6rmulas de soluci6n, discusiones, etc, 86
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