Interrogations - anno II - n. 4 - settembre 1975

ESPANA .. 1975 agricultores vecinos. El tracter y otras maquinas agricolas exigen un minima de superficie para que la explotaci6n sea rentable; el propietario pequefio o mediano tiene que adquirir mas tierras o arrendarlas o paner las suyas en comûn con 1~ de otros propietarios. La cooperaciôn en el campo se ha convertido para muchos en una necesidad. Coment6 el soci6logo Pérez Diaz: «No es s6lo, pues, y esta es mucha, que la mecanizaciôn urgida par la emigraci6n impulse la concentraciôn de la propiedad y la empresa agraria 1 y la integraciôn objetiva entre la economia agraria e industrial. Es que altera la relaci6n y la posici6n respectiva de las diterentes clases sociales, precipitando en todas ellas ,la aparici6n de rasgos modernes, industriales y especificamente empresariales en una parte minoritaria, pero dina.mica y creciente de los agricultores» (5). Se acabaron, pues, de forma definitiva, ciertas formas de migraciôn rural internas hasta hace pocos afios de caracter tradlcional, coma el espectaculo lamentable de las cuadrillas de segadores que se desplazaban del norte -gallegos, leoneses, zamoranos- y del sur -andaluces- hacia las tierras de trigo de la meseta durante los meses de verano. Ademas, la propia emigraciôn ha abierto canales de comunicaciôn, antes inexistentes, entre la ciudad y el campo; los campesinos viven o quieren vivir a la hora de la ciudad, incitados par la difusi6n de los medios de comunicaci6n de masas, en especial recientemente de la televislôn. En 1961, sôlo el 0'5 por ciento de las familias residentes en municipios rurales disponia de la televisi6n; en 1969 la proporciôn ascendlô al 34 par ciento. En esta situaci6n, e,son los campesinos pobres la fuerza revolucionaria conocida antes de la guerra civil, particularmente durante los afios treinta? El problerna agrario alcanz6 entonces un caracter explosivo que hoy ya no tiene, puesto que, por un lado, estân en trance de desaparecer para siempx:e las· ·· estructuras arcaicas que existian en el campo, Y, por otro,· se ha establecido con la industrializaci6n una salida a la endrme reserva de campesinos sin trabajo o pésimamente retribuidos. Ademâs, decenas de miles de explotaciones minifundistas· han desaparecido, cediendo el paso a explotaciones de tipo capitaUsta; el viejo latifundismo se ha visto desplazado por la modernizaci6n capitalista. Naturalmente, los problemas en el campo no han desaparecido, pero en la actualidad son dé otra naturaleza y nada o muy poco tienen que ver con los que· cono- (5) Obra citada, pags. 45-46. 39

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